A priori, no se me ocurre mucha gente a la que le guste afirmar que va de víctima por la vida.
De hecho, se considera prácticamente un insulto: «Fulanito va de víctima»; «¡Ya te estás haciendo la víctima!», etc…
Sin embargo, adoptamos contantemente, la mayoría de seres humanos, actitudes, posicionamientos, creencias, argumentos, etc. en los que nuestra «víctima interior» ha tomado el mando sin que nos demos ni cuenta.
Y no lo digo para juzgar esa actitud, ya que suele ser inconsciente e involuntaria, en la mayoría de los casos. Y el peor perjudicado es, precisamente, el que adopta ese papel. Es cierto que hay quién lo usa para manipular a otros deliberadamente. Pero no es el caso de la mayoría. Por lo menos, es casi seguro que no sea el tuyo.
Pero lo cierto, si te fijas, es que tenemos socialmente aceptado y normalizado un paradigma general, una forma de estar en el mundo… en la que a menudo caben «micro victimismos» (y no tan «micro») que nos pasan del todo inadvertidos. Y, lo peor, que nos sabotean de múltiples formas.
Como digo, no hablo de esto con ánimo de señalar a nadie. De hecho, considero que juzgar y resistir cualquier cosa (y ésta también) es siempre contraproducente.
Lo hago con toda la intención de facilitarte a ti, o al que le pueda venir bien, una toma de consciencia mayor y más nítida en cuánto a su propio personaje victimista para que puedas detectarlo y reconducirlo. Y es importante hacerlo si quieres superarte… Si quieres rebasar los límites que te frenan y te frustran… Si quieres vivir más a lo grande, en definitiva.
¿Cuántas veces te sientes víctima de las circunstancias y cuántas veces ello te hace sufrir de más y cerrarte puertas que podrías cruzar si antes rebasaras ese límite en tu propia mente?
Así que aquí tienes este vídeo con ocho claves para ir soltando cada vez más el rol de víctima.
¡Disfrútalo!
Espero que este contenido te haya resultado útil. Cualquier duda o comentario que te apetezca compartir, déjamelo por aquí abajo!
¡Un abrazo grande y hasta la próxima!
