Ponerme en contacto con Cristina ha sido de las mejores decisiones que he tomado en mi vida.
De pequeña, me sentía débil en cuanto a todo, aprensiva, con muchos miedos y sobre todo pánico a enfermar. Hace unos años me diagnosticaron un problema en el sistema inmune, por lo que yo solita me fui encerrando cada vez más en mi burbuja, evitando todo y perdiendo mi libertad.
Gracias a un amigo, que me habló de caminos nuevos, empecé a buscar todo lo relacionado con la reprogramación para desaprender creencias limitantes y encontré los vídeos de Cristina, que me engancharon muchísimo y me dieron el empujón para ver de otro modo las enfermedades.
En noviembre del pasado año, se me juntaron varios miedos a la vez, que me colapsaron, pensaba que me iba a desencadenar depresión y eso me daba más ansiedad aún, por lo que quise empezar con terapia psicológica y me dieron el contacto de una psicóloga muy buena de mi ciudad, pero yo tenía en mi cabeza a Cristina, ella era diferente a todo lo que había visto hasta ahora, sabía que ese salto que necesitaba me lo iba a dar ella y no otra persona, y en pocas horas me decidí a pedir sesiones individuales con ella y cuánto me alegro!!, de las mejores cosas que he hecho.
Cristina, además de ser una profesional de 10, es un conjunto de tantas cosas buenas que seguramente se me olvidará decir alguna: es muy comprensiva, transparente, coherente, muy muy generosa, tiene una sabiduría espiritual y mental fuera de lo normal, una capacidad brutal para escuchar y no perder el hilo ni un segundo, busca en lo más profundo de nosotros para guiarnos de una manera tan libre, que ni te das cuenta de lo que vas avanzando y para cada duda tiene una respuesta tan lógica, con tanto significado y tan potente para mejorar, que son pequeños tesoros elaborados para tí, exclusivos para tí.
Estas 10 sesiones son como si hubiera hecho el master más importante de mi vida, aprendizaje intensivo de fortaleza mental personalizado, específico para mí, en el que he aprendido tantas cosas, que estaría escribiendo páginas y páginas.
Muchas gracias Cristina por quitarme la venda de los ojos, por enseñarme a valorar el poder que tengo para autosanarme mental y físicamente.
El camino sigue y por supuesto junto a tí, que como siempre te digo, eres la amiga que todos quisiéramos tener cerquita, jaja.